Desde pequeño, siempre me ha fascinado observar a las personas. Sus gestos, movimientos, cómo hablan, cómo reaccionan, qué dice su cuerpo cuando no emiten palabra. En fin, cómo actúan aunque no estén frente a una cámara o sobre un escenario. Hoy, cómo actor, director, cantante y doblajista, esa curiosidad natural por los detalles y las emociones humanas, está presente en cada proyecto que emprendo con la intención de contar historias de la forma más genuina posible.
Este viaje comenzó cuando era niño y, con el correr de los años, me ha llevado a trabajar en distintos proyectos en Argentina, México, Estados Unidos y España. Si bien cada uno fue distinto, siempre los he abordado con la misma pasión, entusiasmo y curiosidad. Y por supuesto, bajo una misma premisa: «Que cada historia cobre vida de una manera auténtica y significativa».